No A La Violencia
No A La Violencia - Escuela Gurruchaga nº 394
martes, 8 de octubre de 2013
La historia de Mileva Maric y Albert Einstein
Mileva Maric y Albert Einstein se conocieron en la Universidad Politécnica de Zürich a finales del siglo XIX. Maric era la única mujer que estudiaba matemáticas y física en aquella universidad. En 1896 iniciaron una relación sentimental y Einstein estaba fascinado por la intensa colaboración intelectual que recibía de parte de su compañera serbia. A la única persona que disgustaba aquella relación era a la madre del genio, una alemana misógina y xenófoba, que nunca vio con buenos ojos a la serbia: “Ella es un libro igual que tú, pero lo que tú necesitas es una mujer. Cuando tengas 30 años, ella será una vieja bruja”. Como sea, la pareja estaba flechada porque ambos hablaban el mismo lenguaje: ella le dio clases de matemáticas (que nunca fueron el fuerte de Einstein), preparaban juntos sus exámenes y compartían el mismo interés por la ciencia y por la música.
Einstein le escribió en 1900: “Estoy solo con todo el mundo, salvo contigo. Qué feliz soy por haberte encontrado a ti, alguien igual a mí en todos los aspectos, tan fuerte y autónoma como yo”. En 1902, Einstein se trasladó a la ciudad de Berna, Suiza, donde consiguió empleo en una oficina de patentes. Tras cinco años de convivencia Albert y Mileva terminaron casándose a comienzos de 1903 y tuvieron su primer hijo al año siguiente. En sus ratos libres, Einstein desarrolló, entre otras cosas, la Teoría de la relatividad especial que habría de revolucionar la física moderna. Los frutos de su trabajo fueron publicados en 1905, en la -en aquel entonces- prestigiosa revista Annalen der Physik. Cuando se le preguntaba a Mileva por qué no firmaba los artículos que elaboraba junto a su esposo, su respuesta era: "Wir sind ein Stein!" (Somos Einstein), que en alemán significa “somos una piedra”. Esta es más o menos la historia oficial, la que todos sabemos; pero se puede ahondar un poco más en la vida privada del genio, en sus inicios y sobre todo, en la relación con su primera esposa. Aunque Mileva fue una sobresaliente matemática, nunca terminó formalmente sus estudios, en cambio Albert pudo defender su tesis doctoral en 1905. Para 1908, Einstein consiguió finalmente un puesto de profesor en la Universidad de Berna. En cuanto a Mileva, el matrimonio la obligó a abandonar definitivamente la universidad y la física. Existen varias cartas del noviazgo en las que Einstein debate con ella sus ideas de la relatividad e inclusive se refiere a “nuestra teoría” y le da un trato de colega. A partir de estas evidencias hay estudiosos que concluyen que las ideas fundamentales de la teoría de la relatividad fueron de Mileva Maric, quien no pudo continuar con su carrera puesto que se hizo cargo del cuidado de los hijos, uno con retraso mental, lo que desde luego le exigió más cuidados maternales. Incluso ahora se sabe que engendraron una niña en 1902, antes de casarse, de la cual se sabe muy poco, sólo que la entregaron en adopción. Mientras ella cuidaba de sus hijos y renunciaba a la ciencia, Einstein desde su puesto académico tuvo el tiempo suficiente para concluir sus estudios y desde luego para desarrollar la teoría, de la que se sabe ahora, no todo el crédito era suyo. En esa pareja de físicos alguien tenía que cuidar a los niños, alguien tenía que lavar y preparar la comida; y ése fue el papel que Einstein y la sociedad patriarcal asignaron a Mileva, quien subordinó todas sus aspiraciones a los objetivos de su esposo y puso todos sus conocimientos a su servicio."Mi gran Albert ha llegado a ser célebre, físico respetado por los expertos que se entusiasman por él. Trabaja incansablemente en sus problemas. Puedo decir que sólo para eso vive. Tengo que admitir, no sin vergüenza, que para él somos secundarios y poco importantes", escribía Mileva a unos amigos. Einstein a su vez admitía: "Nuestra vida en común se ha vuelto imposible, hasta deprimente, aunque no sé decir por qué".
Einstein le escribió en 1900: “Estoy solo con todo el mundo, salvo contigo. Qué feliz soy por haberte encontrado a ti, alguien igual a mí en todos los aspectos, tan fuerte y autónoma como yo”. En 1902, Einstein se trasladó a la ciudad de Berna, Suiza, donde consiguió empleo en una oficina de patentes. Tras cinco años de convivencia Albert y Mileva terminaron casándose a comienzos de 1903 y tuvieron su primer hijo al año siguiente. En sus ratos libres, Einstein desarrolló, entre otras cosas, la Teoría de la relatividad especial que habría de revolucionar la física moderna. Los frutos de su trabajo fueron publicados en 1905, en la -en aquel entonces- prestigiosa revista Annalen der Physik. Cuando se le preguntaba a Mileva por qué no firmaba los artículos que elaboraba junto a su esposo, su respuesta era: "Wir sind ein Stein!" (Somos Einstein), que en alemán significa “somos una piedra”. Esta es más o menos la historia oficial, la que todos sabemos; pero se puede ahondar un poco más en la vida privada del genio, en sus inicios y sobre todo, en la relación con su primera esposa. Aunque Mileva fue una sobresaliente matemática, nunca terminó formalmente sus estudios, en cambio Albert pudo defender su tesis doctoral en 1905. Para 1908, Einstein consiguió finalmente un puesto de profesor en la Universidad de Berna. En cuanto a Mileva, el matrimonio la obligó a abandonar definitivamente la universidad y la física. Existen varias cartas del noviazgo en las que Einstein debate con ella sus ideas de la relatividad e inclusive se refiere a “nuestra teoría” y le da un trato de colega. A partir de estas evidencias hay estudiosos que concluyen que las ideas fundamentales de la teoría de la relatividad fueron de Mileva Maric, quien no pudo continuar con su carrera puesto que se hizo cargo del cuidado de los hijos, uno con retraso mental, lo que desde luego le exigió más cuidados maternales. Incluso ahora se sabe que engendraron una niña en 1902, antes de casarse, de la cual se sabe muy poco, sólo que la entregaron en adopción. Mientras ella cuidaba de sus hijos y renunciaba a la ciencia, Einstein desde su puesto académico tuvo el tiempo suficiente para concluir sus estudios y desde luego para desarrollar la teoría, de la que se sabe ahora, no todo el crédito era suyo. En esa pareja de físicos alguien tenía que cuidar a los niños, alguien tenía que lavar y preparar la comida; y ése fue el papel que Einstein y la sociedad patriarcal asignaron a Mileva, quien subordinó todas sus aspiraciones a los objetivos de su esposo y puso todos sus conocimientos a su servicio."Mi gran Albert ha llegado a ser célebre, físico respetado por los expertos que se entusiasman por él. Trabaja incansablemente en sus problemas. Puedo decir que sólo para eso vive. Tengo que admitir, no sin vergüenza, que para él somos secundarios y poco importantes", escribía Mileva a unos amigos. Einstein a su vez admitía: "Nuestra vida en común se ha vuelto imposible, hasta deprimente, aunque no sé decir por qué".
Con el paso del tiempo la relación se tornó disfuncional. Ella ya no le resultaba divertida y tampoco le aportaba nuevas ideas ni conocimientos.
Las “Reglas de conducta” que Albert Einstein le impuso por escrito en 1914 son una cruda muestra de su autoritarismo y, a su vez, del machismo y violencia sicológica que ejerció en contra de Mileva:
“A. Te encargarás de que:
mi ropa esté en orden, que se me sirvan tres comidas regulares al día en mi habitación, que mi dormitorio y mi estudio estén siempre en orden y que mi escritorio no sea tocado por nadie, excepto yo.
B. Renunciarás a tus relaciones personales conmigo, excepto cuando éstas se requieran por apariencias sociales. En especial no solicitarás que:
me siente junto a ti en casa, que salga o viaje contigo.
C. Prometerás explícitamente observar los siguientes puntos cuanto estés en contacto conmigo:
no deberás esperar ninguna muestra de afecto mía ni me reprocharás por ello, deberás responder de inmediato cuando te hable, deberás abandonar de inmediato el dormitorio o el estudio y sin protestar cuanto te lo diga.
D. Prometerás no denigrarme a los ojos de los niños, ya sea de palabra o de hecho.”
D. Prometerás no denigrarme a los ojos de los niños, ya sea de palabra o de hecho.”
Con este tipo de imposiciones obviamente que las cosas no funcionarían nunca, por lo que los Einstein terminaron separándose en 1914. Einstein volvió a casarse en 1915 con una de sus primas, Elsa Einstein, quien también era divorciada y tenía dos hijas. Esta nueva relación marital fue como un necesario soplo de vida para el aún desconocido físico, ya que apenas un año después y con una inusual lucidez y energía dio a conocer su famosa Teoría General de la Relatividad.
Elsa fue la mujer sumisa que Einstein buscaba. En silencio y total sumisión supo mantenerse a prudente distancia, dedicada al hogar y facilitándole el trabajo de investigación. Su doméstica obediencia dio un paso más cuando aceptó organizarle la agenda y restringirle el número de visitantes que aspiraban hablar con él, a medida que crecía su fama.
De los hechos se desprende que Einstein nunca necesitó una esposa sino una secretaria, y que no quiso formar una pareja científica ni conceder crédito alguno en su teoría a su ex esposa Mileva. Quizá por eso, de alguna manera le pagó por su aporte, al otorgarle el dinero que ganó por el Premio Nobel de Física.
Un detalle bastante revelador aportado por la feminista alemana Senta Trömel-Plözt es que, cuando Albert y Mileva se separaron oficialmente en 1919, el documento del divorcio incluyó una cláusula de que, en caso de recibir Einstein algún premio por los artículos publicados en 1905 en los Annalen der Physik, debía entregárselo íntegramente a Mileva.
¿Tenía la esperanza Mileva que ese trabajo revolucionaría al mundo? ¿Cómo pudo saberlo si no fue parte del mismo? Fue en los años de su vida conjunta, hasta 1914, cuando nacieron las obras más importantes de Einstein, por lo que algunos creen que el papel de su mujer era significativo, sobre todo en matemáticas, materia en la que alguna vez brilló en su Facultad. Mileva Maric. Y fue así que en 1921 Albert Einstein ganó el Nobel de Física por sus publicaciones de 1905, y un año después le entregó la totalidad del dinero del premio a su ex-esposa. Y también hay que decirlo: Einstein era un misógino empedernido. Estaba convencido de que “muy pocas mujeres son creativas. No enviaría a mi hija a estudiar física. Estoy contento de que mi segunda mujer no sepa nada de ciencia”. Decía también que “la ciencia agría a las mujeres”, de ahí la opinión que tenía de Marie Curie: “nunca ha escuchado cantar a los pájaros”. Aun así, dentro de ese machismo recalcitrante, fue quien acuñó la célebre frase: “¡Triste época la nuestra! Es más fácil desintegrar un átomo que un prejuicio”.
¿Tenía la esperanza Mileva que ese trabajo revolucionaría al mundo? ¿Cómo pudo saberlo si no fue parte del mismo? Fue en los años de su vida conjunta, hasta 1914, cuando nacieron las obras más importantes de Einstein, por lo que algunos creen que el papel de su mujer era significativo, sobre todo en matemáticas, materia en la que alguna vez brilló en su Facultad. Mileva Maric. Y fue así que en 1921 Albert Einstein ganó el Nobel de Física por sus publicaciones de 1905, y un año después le entregó la totalidad del dinero del premio a su ex-esposa. Y también hay que decirlo: Einstein era un misógino empedernido. Estaba convencido de que “muy pocas mujeres son creativas. No enviaría a mi hija a estudiar física. Estoy contento de que mi segunda mujer no sepa nada de ciencia”. Decía también que “la ciencia agría a las mujeres”, de ahí la opinión que tenía de Marie Curie: “nunca ha escuchado cantar a los pájaros”. Aun así, dentro de ese machismo recalcitrante, fue quien acuñó la célebre frase: “¡Triste época la nuestra! Es más fácil desintegrar un átomo que un prejuicio”.
Mileva vivió hasta el último de sus días en Zúrich, en un apartamento con vista a la facultad en la que estudiaron juntos. El piso fue comprado justamente con el dinero del Premio Nobel.
Sirva este pequeño retrato de Mileva Maric como homenaje a esas miles, millones de abnegadas esposas y madres, que han sacrificado sus sueños,carreras e ideales, porque el instinto maternal y el amor han sido más fuertes que el estatus.
Escrito por Maria Suarez Toro. Todo nuestro agradecimiento hacia ella.
Escrito por Maria Suarez Toro. Todo nuestro agradecimiento hacia ella.
Parte de la tesis de María Suarez Toro de la Univ de Costa RIca, sobre el aporte invisibilizado de las mujeres. Esa tesis despues fue teatralizada por el grupo Alas de Mariposa.
Fuente: http://heroinas.blogspot.com.es/2012/08/mileva-maric-la-primera-esposa-del.html
Fuente: http://heroinas.blogspot.com.es/2012/08/mileva-maric-la-primera-esposa-del.html
"Si él hubiera nacido Mujer"
De los 16 hermanos de Benjamín Franklin, Jane es la que más se le parece en cuanto a talento y fuerza de voluntad.
Pero a la edad que Benjamín se marchó de casa para abrirse camino, Jane se casó con un talabartero pobre, que la aceptó sin dote, y 10 meses después dio a luz a su primer hijo. Desde entonces, durante un cuarto de siglo, Jane tuvo un hijo cada dos años. Algunos niños murieron, y cada muerte le abrió un tajo en el pecho. Los que vivieron exigieron comida, abrigo, instrucción y consuelo. Jane paso noches en vela acunando a los que lloraban, lavó montañas de ropa, bañó montoneras de niños, corrió del mercado a la cocina, fregó torres de platos, enseñó abecedarios y oficios, trabajó codo a codo con su marido en el taller, y atendió a los huéspedes cuyo alquiler ayudaba a llenar la olla. Jane fue esposa devota y viuda ejemplar, y cuando ya estuvieron crecidos sus hijos se hizo cargo de sus propios padres achacosos y de sus hijas solteronas y de sus nietos sin amparo.
Jane jamás conoció el placer de dejarse flotar en un lago, llevada a la deriva por un hilo de cometa, como suele hacer Benjamín a pesar de sus años. Jane nunca tuvo tiempo de pensar, ni se permitió dudar. Benjamín sigue siendo un amante fervoroso, pero Jane ignora que el sexo puede producir algo mas que hijos.
Benjamín, fundador de una nación de inventores, es un gran hombre de todos los tiempos. Jane es una mujer de su tiempo, igual a casi todas las mujeres de todos los tiempos, que ha cumplido su deber en esta tierra y ha expiado su parte de culpa en la maldición bíblica. Ella ha echo lo posible por no volverse loca y ha buscado, en vano, un poco de silencio.
Su caso carecerá de interés para los historiadores.
Eduardo Galeano
Memoria del fuego / Las caras y las máscaras
Publicado por: Editorial Siglo XXI
jueves, 3 de octubre de 2013
Ten en cuenta lo siguiente
Observa, si con quien mantienes una relación de pareja, se comporta de alguna de estas maneras constantemente:
Éstas y muchas mas son las razones para que comiences a darte cuenta de lo que sucede. De todas las mujeres asesinadas por sus parejas, el 25% de ellas (una cada cuatro) son chicas de entre 14 y 25 años, que creyeron en el amor romántico y en su pareja, olvidándose de preocuparse de su seguridad y bienestar físico y emocional.
- Controla lo que haces, exige explicaciones por todo y pretende conocer hasta tus pensamientos. No quiere que tengas "secretos" con él.
- Quiere saber con lujo de detalles a dónde vas, dónde estuviste y con quién; cuánto tiempo pasas en cada sitio, cuánto tiempo vas a estar fuera y a qué hora vuelves. Te llama continuamente para comprobarlo, se "da una vuelta" por tu casa o te busca en donde estés.
- Te vigila permanentemente, te critica e/o intenta que cambies tu manera de vestir, de peinarte, de maquillarte o, simplemente, que cambies tu manera de hablar o comportarte.
- Realiza prohibiciones o te amenaza con respecto a los estudios, trabajo, costumbres o actividades y relaciones que lleves a cabo.
- Quiere conocer a todos y todas tus parientes, amistades, vecinos, compañeros de estudios o trabajo para saber como son. Luego se la pasa comentando cosas malas de ellos, sospechando y desconfiando de que los acompañes.
- No expresa ni habla sobre lo que desea, quiere que lo adivines, y que luego estés pendiente constantemente de él. Ademas de demostrarse enfadado y frustrado cuando no haces las cosas como quieres, sin importar el grado de importancia.
- Impone reglas, horarios y estereotipos en la relación (esto se puede hacer solo así, a esta hora y sólo conmigo). Es caprichoso y se contradice constantemente, utilizando doble moral.
- Te compara con otras personas, haciéndote sentir peor y humillada. "Si fueras como X chica no tendría que...", "¿Por qué como X chica? Ella si sabe hacer bien las cosas".
- Amenaza constantemente con dejarte o contar cosas humillantes si no haces lo que desea. "Si haces esto, yo voy a contar que vos..."
- Induce sentimientos de lástima, justificándose o insistiendo con su vida desdichada o infancia infeliz.
- Te avergüenza hasta en público, dejándote ridícula frente a otras personas, ademas de usar pronombres, diminutivos o términos que la minimizan como persona. Te acusa de ver, coquetear y demás actos con otras personas, te cela excesivamente.
Éstas y muchas mas son las razones para que comiences a darte cuenta de lo que sucede. De todas las mujeres asesinadas por sus parejas, el 25% de ellas (una cada cuatro) son chicas de entre 14 y 25 años, que creyeron en el amor romántico y en su pareja, olvidándose de preocuparse de su seguridad y bienestar físico y emocional.
miércoles, 2 de octubre de 2013
Prevención de la violencia de genero
El principal camino para acabar con la violencia de género es la prevención. Esto incluye, por supuesto, un cambio global en la forma de ver las relaciones entre mujeres y hombres, un cuestionamiento de los roles sociales y estereotipos, del lenguaje, etc. Estos cambios deben partir de las personas adultas con el objetivo de que se transmitan eficazmente a niños y niñas.
Además, tu puedes prevenir y evitar implicarte en una relación que puede llegar a ser violenta:
En primer lugar, detectar manipulaciones, aproximaciones no solicitadas, desconfiar de promesas que no tienen sentido en un momento de la relación, tener claro que decir que “no” a algo no es negociable, alejarse cuando esa persona que se te acerca tratando de hacerte ver que tenéis mucho en común o que le debes algo. Para todo esto es muy importante confiar en tu intuición, en las sensaciones de desasosiego que te producen. Cuando conoces a alguien le evalúas igualmente, valoras si esa persona encaja contigo; solo es importante que a partir de ahora incluyas también estos puntos si quieres prevenir encontrarte en una relación violenta. Valora sus ideas sexistas, cómo fueron sus relaciones anteriores (si rompió él o no, cómo habla de ellas…), etc.
jueves, 26 de septiembre de 2013
Historias de Mujeres Maltratadas
Los casos se suceden, y realmente espantan...
"En la Corte Suprema, se reciben alrededor de 50 denuncias por violencia de género.
Una mujer denuncia que su ex pareja la "picaneó" 4 horas, otra muestra una filmación de su ex novio pegándole adelante de su hija, una tercera está internada porque el ex marido le disparó, la esposa del bajista de Divididos denunció que le dio una paliza. "
*Testimonio de una mujer victima de la violencia de género:
" Yo siempre pensaba que todo era por mi culpa, me odiaba, quería morir, sentía que todas las infelicidades que él tenía eran por mi culpa, cada día intentaba dar lo mejor de mí, estar sonriente, vestirme bien, estar atenta a lo que él quería.
Cómo podía escapar de esa situación?, en mi cabeza no había otra posible vida, no se si me entienden, cuando sientes que no hay nada más que hacer.
Pronto empecé a tener mucha ansiedad, sentía que me quedaba sin aire, cuando él comenzaba a dar síntomas de que no le gustaba mi respuesta yo sentía como el aire se me escapaba, como si mis pulmones estuviesen arrugados, y no entrara el aire necesario.
Creo que no me he dado cuenta de lo que estaba pasando, solo cuando pude estar a 6.000 kilómetros de él pude ver lo que había pasado. Así no entiendo porqué yo seguía con él, con todo lo que él estaba haciendo conmigo. Me llamaba a la madrugada, diciéndome que no podía dormir, exigiéndome que vaya a su casa, solo para mantener relaciones. No le importaba si llovía, si eran las cuatro de la mañana y no había forma de llegar hasta su casa.
Recuerdo que yo vivía en una habitación, en Madrid, cerca de la boca de metro de Urgel. Yo nunca podía ir a mi casa, pasaban meses completos en los que mi habitación estaba vacía, apenas podía ir a buscar ropa, con el tiempo contado, él calculaba el tiempo que tardaría en ir y venir, y si llegaba tarde, me acusaba de que me había ido a otro sitio, una y otra vez, hasta que solo podía darle la razón inventándome que había ido a alguna tienda o que me había parado en un bar. Cuando solo me había demorado por que no encontraba mis cosas.
El teléfono móvil era una tortura para mí, él se enfurecía si no contestaba por que no lo escuchaba, y cuando veía en la pantalla de mi viejo su nombre, sentía como mi alma era aplastada, una sensación de tristeza incomparable, todos esos sentimientos que tenía que ocultar para atender el teléfono con la mejor actitud y disposición.
Los golpes que recibía de él ya no me dolían en el cuerpo, dolían en mi alma. "
"En la Corte Suprema, se reciben alrededor de 50 denuncias por violencia de género.
Una mujer denuncia que su ex pareja la "picaneó" 4 horas, otra muestra una filmación de su ex novio pegándole adelante de su hija, una tercera está internada porque el ex marido le disparó, la esposa del bajista de Divididos denunció que le dio una paliza. "
*Testimonio de una mujer victima de la violencia de género:
" Yo siempre pensaba que todo era por mi culpa, me odiaba, quería morir, sentía que todas las infelicidades que él tenía eran por mi culpa, cada día intentaba dar lo mejor de mí, estar sonriente, vestirme bien, estar atenta a lo que él quería.
Cómo podía escapar de esa situación?, en mi cabeza no había otra posible vida, no se si me entienden, cuando sientes que no hay nada más que hacer.
Pronto empecé a tener mucha ansiedad, sentía que me quedaba sin aire, cuando él comenzaba a dar síntomas de que no le gustaba mi respuesta yo sentía como el aire se me escapaba, como si mis pulmones estuviesen arrugados, y no entrara el aire necesario.
Creo que no me he dado cuenta de lo que estaba pasando, solo cuando pude estar a 6.000 kilómetros de él pude ver lo que había pasado. Así no entiendo porqué yo seguía con él, con todo lo que él estaba haciendo conmigo. Me llamaba a la madrugada, diciéndome que no podía dormir, exigiéndome que vaya a su casa, solo para mantener relaciones. No le importaba si llovía, si eran las cuatro de la mañana y no había forma de llegar hasta su casa.
Recuerdo que yo vivía en una habitación, en Madrid, cerca de la boca de metro de Urgel. Yo nunca podía ir a mi casa, pasaban meses completos en los que mi habitación estaba vacía, apenas podía ir a buscar ropa, con el tiempo contado, él calculaba el tiempo que tardaría en ir y venir, y si llegaba tarde, me acusaba de que me había ido a otro sitio, una y otra vez, hasta que solo podía darle la razón inventándome que había ido a alguna tienda o que me había parado en un bar. Cuando solo me había demorado por que no encontraba mis cosas.
El teléfono móvil era una tortura para mí, él se enfurecía si no contestaba por que no lo escuchaba, y cuando veía en la pantalla de mi viejo su nombre, sentía como mi alma era aplastada, una sensación de tristeza incomparable, todos esos sentimientos que tenía que ocultar para atender el teléfono con la mejor actitud y disposición.
Recuerdo también que en los casi tres años que estuve con él no tuve ni un solo amigo o amiga, no tenía tiempo para mi, no podía imaginar tener tiempo para alguien más, todos mis amigos los perdí, por que él decía que eran un posible engaño, mis amigas también las perdí, ya que no tenía tiempo para ellas. Aunque fueron dos de mis amigas las que siempre estuvieron, dos chicas a las que le debo la vida, por que me cuidaron cuando yo estaba con extrema delgadez, no tenía ganas de comer, y si comía más de cinco cucharadas de sopa, la devolvía automáticamente. Fue una época de mi vida muy oscura, y que sin duda alguna ha marcado mi vida, hay cosas que nunca podré olvidar, hay pesadillas que seguiré teniendo por muchos años más.
Los golpes que recibía de él ya no me dolían en el cuerpo, dolían en mi alma. "
sábado, 14 de septiembre de 2013
Violentómetro
Éste es el Violentómetro. Es un instrumento creado para la medición sobre los grados de violencia al género femenino, pero también se puede aplicar al masculino. Comienza con grados leves o "suaves" (sin descalificar la gravedad) y va hasta los mas fuertes y peligrosos. Al costado izquierdo se lee "¡Ten cuidado! La violencia aumentará", "¡Reacciona! No te dejes destruir" y "¡Necesitas ayuda profesional! como advertencias sobre lo que puede llegar a ocurrir si dejas pasar las cosas.
Si sufres o sufriste alguno de esos ítems, deberías llamar inmediatamente a alguien para que te brinde ayuda, en Argentina la violencia crece a velocidades importantes, teniendo razones inconclusas y finales lamentables. Sin embargo hay centros de ayuda que intentan hacer lo posible para prevenirla.
(En Rosario)
Programa de atención en Violencia de Género
Si sufres o sufriste alguno de esos ítems, deberías llamar inmediatamente a alguien para que te brinde ayuda, en Argentina la violencia crece a velocidades importantes, teniendo razones inconclusas y finales lamentables. Sin embargo hay centros de ayuda que intentan hacer lo posible para prevenirla.
(En Rosario)
CASA DE LA MUJER
Dirección de correspondencia:San Nicolás 281 Rosario 2000.
Tel.0341 4302341
CEDEIFAM
Centro Desarrollo para la Familia y la Mujer Vespucio 2155 Tel.:4489092 Fax:4381111–cel:155412941 e-mail: cedeifam@tau.org.ar
Atención sicológica, social y jurídica gratuita; grupo de mujeres de ayuda mutua Horario de atención: lunes de 17hs a 19:30.
CENTRO DE ORIENTACION A LA VICTIMA DE DELITOS SEXUALES
2153,P.alta (Comisaría 5a.) Tel.:0341-472-8523 24hs
e-mail: comisariamujerrosario@hotmail.com
- Línea gratuita:
- 0800 444 0420
- Tel. 4802446
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